Cuanto antes detectemos un problema de audición, antes se
podrá desarrollar la comunicación del bebé. Sin embargo,
¿Cómo detectar
problemas de audición en niños pequeños?
A los 6 meses/1 año aproximadamente, se puede realizar un
diagnóstico definitivo, pero hay algunas señales previas que pueden advertir a los
padres de que existe un problema auditivo.
Si el bebé no se sobresalta o despierta con ruidos
fuertes que demandarían, al menos, asustarse por parte del niño, puede ser una
de las primeras señales que mantengan a los padres en alerta.
Otro signo de sospecha puede ser que el bebé no gire la
cabeza ni busque la mirada del emisor del mensaje, ni emita ningún tipo de
sonido para llamar la atención.
Sería
motivo de preocupación que un niño a partir de los 12 meses no prestara
atención a los cuentos adaptados a su edad, aunque sí la preste a sus dibujos
sobre todo si son de colores vivos y brillantes. Si a los 18 meses aproximadamente, no identifica su nombre, ni
hace frases de dos palabras ni comprende ordenes sencillas que no vayan
acompañadas de gestos, los padres tienen otro signo de alarma.
A partir de los 3 años los signos serían aún
más evidentes si no entiende las palabras que se le dicen, ni repite frases ni
contesta cuando se le preguntan cosas sencillas. A partir de los 4 años, el
niño sordo no puede contar lo que le pasa ni es capaz de mantener una
conversación sencilla.
A pesar de
que existen trucos para detectar la sordera, hay veces que es necesario guiarse
por la intuición, ya que estos fallan. Es posible que el niño sordo sí responda
al "estímulo auditivo" pero sin saber que existe un sonido, ya que
este se propaga en el espacio a través de ondas y el pequeño las percibe por otros
lugares diferentes al oído; el pecho, la zona del cuerpo sobre la que se
encuentra apoyado, la cabeza, etc.
Hay otras
ocasiones en que la sordera existe pero sólo afecta a unos sonidos concretos.
Es muy probable que el niño tenga más problemas para escuchar en unos ambientes
que en otros (por ejemplo, escucha en casa pero no en el parque) o con
determinadas personas (escucha a papá pero no a la abuela).
A modo de
resumen:
Determinadas señales o indicios que
permiten a los padres averiguar si su hijo tiene problemas
de audición. He aquí cuáles son, según la edad del pequeño.
• De 0 a 6 meses: el bebé no
reacciona a los ruidos intensos, duerme profundamente en
ambientes muy ruidosos, no sonríe ni se tranquiliza cuando te escucha, no se
gira cuando le hablas, no te busca con la mirada al oír tu voz y no emite
sonidos para llamar tu atención.
• De 6 meses a 1 año: no reacciona a los sonidos ni a
la pronunciación de su nombre, no imita las vocalizaciones
de los adultos, no se orienta hacia sonidos cotidianos o palabras familiares y
no entiende una negación o un "adiós", a menos que se acompañe
de un gesto indicativo.
• De 1 año a 18 meses: no
dice "mamá" ni "papá" y no señala los objetos ni las
personas conocidas cuando se les nombra.
Recomendación
para los padres:
Ante
cualquier signo de alarma, acude a un especialista de la audición (audiólogo)
para que haga una revisión exhaustiva de su audición. Tú te quedarás más tranquilo y, al mismo tiempo, estarás favoreciendo el futuro desarrollo comunicativo del niño, de haber un problema de audición.
Bibliografía: http://www.crianzanatural.com/art/art108.html
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